Continuando con nuestros "Álbumes del Recuerdo" en el diario El Llanquihue, presentamos a continuación el que hemos confeccionado para el sábado 30 de enero del 2010. Esta página es elaborada por el CEPH todos los días sábados, y es publicada en la página A2 en el formato impreso en papel del diario El Llanquihue. La información y fotografías pertenecen a nuestro Archivo y a material que es facilitado por la propia comunidad, como así mismo de la recopilación y análisis de bibliografía en diversas fuentes y a nuestras propias investigaciones. AMPLIAR FAMILIA WERNER WINKLER El domingo 31 de enero de 1943, a las 15.30 horas, Calbuco fue azotado por un gigantesco incendio que redujo a cenizas gran parte de la ciudad. De acuerdo al Parte Oficial del Cuerpo de Bomberos, comandado en esa época por Carlos Mechsner, el siniestro se inició en el inmueble propiedad de Custodio Mansilla, ubicado en calle Antonio Varas s/n entre Ernesto Riquelme y Federico Errázuriz. Ese día muchas familias se encontraban fuera de sus casas, disfrutando de un caluroso domingo, y otras habían viajado en sus lanchas a la fiesta de la Candelaria en Carelmapu el 2 de febrero. El fuego se propagó rápida y violentamente por varias manzanas, debido a varios factores: el fuerte viento sur en un comienzo y su cambió de dirección posteriormente; la escasez de agua en los pozos de emergencia tras un caluroso verano; sequedad de las tejuelas de las casas; falta de implementación en bomberos para este tipo de incendios y la voracidad de las llamas que impidió un trabajo efectivo del personal. El balance final de esta catástrofe dio como resultado la destrucción total de 118 casas y millonarias pérdidas en inmuebles, menaje y mercaderías. La imagen captada ese día, muestra una vista general de Calbuco mientras ardía por varios frentes. FRUTILLAR Fue fundado el 23 de noviembre de 1856 por inmigrantes alemanes que se asentaron en la ribera oeste del lago Llanquihue durante el proceso de colonización germana en el gobierno del Presidente Manuel Montt. Los colonos en un comienzo construyeron sus casas en los cerros de los alrededores, debido a lo pantanoso del terreno cercano al lago. Se dedicaron por entero a las labores agrícolas y a la agroindustria, con el funcionamiento de lecherías, molinos, destilerías, curtiembres y algunos almacenes dedicados a la venta de víveres e implementos, incorporando al naciente villorrio sus costumbres y tradiciones típicas que traían desde sus tierras natales. Dado que el pueblo era paso obligado entre Puerto Montt y Osorno tuvo un rápido desarrollo a través del comercio y el establecimiento de pequeñas industrias. En lo cultural, la ciudad se encuentra realizando por estos días la 42 versión de las Semanas Musicales de Frutillar (27 de enero al 5 de febrero), que desde 1968 permite que la música clásica esté presente todos los años, con la presentación de afamadas orquestas e intérpretes nacionales e internacionales. La imagen, captada por Ernst Karl a mediados de la década de 1930, muestra una vista general de Frutillar Bajo. INFORMACIONES COMPLEMENTARIAS Grande incendio de Calbuco (Artículo extraído de http://cuadernoscaicaen.blogspot.com/2006/08/el-gran-incendio-de-calbuco-en-1943.html) LIBRO DE PARTES DE ALARMA COMANDANCIA ACTA DE INCENDIO En Calbuco, domingo 31 de enero de 1943 a las 15;30 hrs., se declaro un incendio en la propiedad del señor A. Custodio Mancilla, ubicada en la calle Antonio Varas s/n entre Ernesto Riquelme y Federico Errázuriz; el edificio estaba ocupado por el señor. Hugo Herrera E., capitán de Puerto, quien además de la oficina que desempeña, mantenía allí sus habitaciones particulares. El Sr. Herrera no se encontraba en ese momento en a Ciudad. El Comandante infrascrito no se encontraba a la hora del día indicado en la ciudad, sino que a una larga distancia del pueblo, y de donde no era posible distinguir demostraciones del siniestro por lo que, sólo hasta la hora de su llegada, más o menos a las 18:00 horas, pudo darse de la magnitud de la catástrofe. Por esta circunstancia los datos anotados en el presente parte, corresponden a los datos proporcionados por personas que en el momento de producirse el incendio, estaban en la ciudad y que fueran los primeros en acudir, al darse la alarma. Según ellos, el fuego comenzó en la casa anotada más arriba, el cual se propagó rápidamente debido a que en la oficina de la Capitanía existían algunos tambores de parafina, que se utilizaba para el servicio del faro que existe en el muelle de pasajeros. Debido a las circunstancias anotadas, y por ser día de Domingo en que gran parte de la población se encontraba fuera aprovechando el caluroso día. El fuego tomó proporciones imprevistas, razón que impidió que las bombas pudieran actuar de inmediato; fue necesario esperar hasta reunir algunas personas que pudieran arrastrar el material hasta las cercanías del sitios amagado. Contribuyó a la propagación del fuego el fuerte viento del Sur, el que poco más tarde cambió de sentido, soplando brisa de oeste, lo que vino a complicar más la situación, pues el fuego también cambió de dirección y ataco edificios que no corrían peligro; fue necesario entonces, para dominar el fuego, distribuir el escaso material en varios sectores. Cuando esfuerzos se hicieron para detener el desastre, no dieron el resultado previsto, pues a una escasa hora de haber comenzado el fuego, ya abarcaba varias manzanas por distintas direcciones; pues ardían edificios de las calles Antonio Varas, Ernesto Riquelme, F. Errázuriz. En esta última se encontraban edificios de dos pisos, los que contribuyeron a incendiar a su vez, debido a su altura, a edificios bastante distantes del foco mismo del fuego; tanto es así que una casa ubicada en calle Errázuriz esquina de Varas predio a otro de calle Esmeralda, esquina de Varas. En esta forma se propagó a otros barrios. Debido a estas circunstancias excepcionales, las bombas no pudieron actuar normalmente, pues por una parte, hubo necesidad de retirar el material amagado por el fuego, por otra parte el agua pronto comenzó a escasear; y finalmente, los voluntarios, y personas ajenas a la institución debieron abandonar sus labores en las bombas para salvar sus muebles y enseres, ya que en sus casas se encontraban el peligro de incendiarse. Más o menos a las 17:30 horas, el fuego abarcaba ya seis manzanas, haciéndose imposible toda labor, pues parte del material tubo que ser abandonado ante el peligro que corrían las personas que lo atendían. Tampoco fue posible llevar las bombas hacia las calles de salida, se encontraban en llamas. No fue posible en un principio proceder al derribo de algunos edificios, por la falta absoluta de elemento apropiados, pues la única Cía., de salvataje se encontraba en un sector donde no era posible sacarla, por otra parte, el poco material disponible estaba en trabajo, y no habría sido prudente trasladarlo a otros sectores. En esta emergencia, el fuego seguía consumiendo edificios. Cada vez con mayor rapidez, producidos por los cambios de viento, por lo ligero del material edificado y por la carencia de agua. Así a las 18: 30 horas el fuego ya habría hecho su obra; además de las calles ya nombrada, en la de Esmeralda, Angamos, Serrano, Condell, Aureliano, Sánchez, Miramar, Plaza Ramírez y parte de la Avda .Douglas (hasta la altura de la Empresa Eléctrica y la que fue salvada debido al derribo de cercos y pequeños casuchos). En la de Vicuña Mackenna, cuando ya el peligro parecía alejado, pues ni remotamente se creía existiera, comenzó a arder el tejado de la casa de propiedad de la firma Guillermo Schmeisser e hijos, la que por ser de material ligero, no pudo ser salvada. En este sector el fuego terminó en la última de dicha avenida. En la calle Eulogio Goycolea, pudo cortarse el fuego a más o menos 100 metros de Ernesto Riquelme, para ello fue necesario que la Cía. de salvataje derribara una pequeña casa, contribuyó a este buen resultado la existencia de una pequeña muralla corta fuego. Dominado el peligro en esta parte ya fue posible trasladar algún material, con grandes esfuerzos a la Plaza Balmaceda esquina de E. Riquelme, pues la casa ocupada por la Gobernación ubicada en este sector ya se encontraba en llamas; allí pudo derribarse una bodega, evitándose así el que el fuego continuara por la calle de Galvarino Riveros. En el mismo sector de la plaza en calle E. Riquelme con J. M. Carrera el fuego amenazaba la escuela N° 1, la que pudo ser salvada tras grandes y tenaces esfuerzos, pues la bomba que se encontraba en el patio de ese establecimiento, no pudo actuar, debido a que el chorizo no alcanzaba a tomar agua, pues el pozo es de gran profundidad, fue necesario derribar una pared y pudo cortarse el fuego usando baldes y tarros para arrojar el agua. Así pudo en esa parte conjurarse el peligro y evitar que el fuego pusiera en peligro la Iglesia Parroquial y lo edificado en la calle J.M. Carrera. Cuando el fuego consumía la última casa de la Avenida. V. Mackenna, donde se encontraba la oficina sanitaria, recibimos el auxilio del Cuerpo de Bomberos de Puerto Montt, cuyos voluntarios tras grandes dificultades pudieron desembarcar sus bombas y desplegar parte del material; pero debido a los pocos elementos de desembarco, dicha tarea demoró algo de tiempo por lo que la labor de estos se limitó a apagar escombros en la parte alta, pues aún había grandes llamaradas, esta labor se efectuó afrontando serios peligros, pues el material fue trasladado por el cerro donde no existía subida alguna y las bombas debieron trabajar desde la playa. El fuego quedó dominado más o menos a las 20:00 horas. El trágico balance de esta catástrofe dio como resultado la desaparición de 118 casas, con siguiente detalle; 54 casas de un piso 23 de un piso con mirador, 38 de dos pisos, 2 de tres entre estas se encontraba una casa de material sólido, cuyo interior se quemó totalmente. Las pérdidas según declaración de los afectados y por conocimiento propio ascienden a las siguientes cifras; inmuebles $5.159.000-, menaje y mercaderías, $ 3.668.000.- por todo esto existan seguros comprometidos que alcanzaban a $ 1.581.000.- de las 118 propiedades destruidas, solo 34 tenían seguro. En este siniestro el Cuerpo de Bomberos tubo que lamentar la perdida total de su edificio y parte del material que fue imposible sacar, como también el archivo de Directorio y Comandancia, de la que solo se libero el presente libro de partes, pues no se encontraba en el cuartel. Para mayor claridad se adjunta en hojas por separado a la presente acta, un croquis del pueblo con todas las anotaciones más importantes, como también el detalle completo de las propiedades incendiadas. CARLOS MECHSNER S. COMANDANTE 1943 |
30 enero 2010
"Álbum del Recuerdo - Imágenes de Nuestra Tierra" - Diario El Llanquihue - 30 de enero de 2010
24 enero 2010
"Álbum del Recuerdo - Imágenes de Nuestra Tierra" - Diario El Llanquihue - 23 de enero de 2010
Como todas las semanas, publicamos en este primer mes del año 2010, un nuevo "Álbum del Recuerdo", página que el CEPH edita para el diario El Llanquihue, con imágenes e información de nuestro Archivo y con aportes facilitados por la comunidad. Esta sección se publica todos los días sábados en la página A2 del diario en su formato impreso en papel. En esta oportunidad la edición corresponde al sábado 23 de enero de 2010.
MATRIMONIO FRANZ - NIEPEL El 10 de enero de 1921, se vivió en Puerto Montt una especial inauguración, inédita en gran parte del país: la incorporación de tranvías tirados por caballos, los llamados "carros de sangre", la primera movilización colectiva de la ciudad. Una vez terminada la enrieladura de las calles por donde transitarían, la Empresa de Carros Urbanos, dirigida por Juan de Dios Donoso, puso en marcha el servicio con carros que circulaban desde calle Copiapó con Antonio Varas hasta Angelmó, quedando prácticamente unida toda la ciudad. El recorrido partía cada 20 minutos de oriente a poniente, y viceversa. La tarifa era de 20 centavos en primera clase, y 10 centavos en segunda clase. La capacidad de cada carro era de 10 pasajeros sentados y 5 de pie. El servicio duró solo algunos años, por lo riguroso del clima. Las constantes lluvias, derrumbes y torrentes convertían las calles en lodazales o las cortaban, cubriendo o destruyendo las líneas; las altas mareas al llegar a Angelmó, cubrían también las líneas, por no existir un malecón contra las olas. En todo caso, la experiencia de estos tranvías, dejó en los puertomontinos de la época un nostálgico recuerdo de uno de los aspectos más originales que se han vivido localmente. En la imagen, captada en 1928 (autor desconocido) se aprecia un “carro de sangre” en la esquina de Miraflores con avenida Angelmó, antes que se construyera el Puerto. CARROS DE SANGRE: RECORRIDO Y REGLAMENTACIÓN En la fotografía, captada en 1925 (autor desconocido), se observan los rieles por donde circulaban los “carros de sangre” en calle Antonio Varas. El recorrido de estos tranvías, comenzaba en calle Copiapó, y tenía los siguientes paraderos: Club Alemán, Plaza de Armas, esquina Guillermo Gallardo, esquina Pedro Montt, Botica Grassau (entre Cauquenes y Chillán), esquina Talcahuano, casa de Ema Outridge, casa de Adolfo Oelckers, esquina Valdivia, y final de Cayenel, antes de doblar en 21 de mayo para dirigirse a Angelmó. Parte de la reglamentación del servicio decía: “es prohibido fumar en el departamento de primera; en el de segunda se permite, salvo cuando el tranvía llevare luz encendida para evitar accidentes; es prohibido subir las ventanillas cuando estuviere lloviendo y hubiere mucho viento; los pasajeros tendrán derecho a llevar maletines o bultos de mano que quepan cómodamente debajo de los asientos; se prohíbe al cobrador y conductor admitir pasajeros en estado de ebriedad; se ruega al público dar cuenta a la administración si notare desatención, malos modales u oyeren proferir palabras indecorosas a los empleados de la empresa; los bomberos en actos de servicio, los policías de seguridad y un cronista de cada diario tendrán pasaje libre, como también el inspector de calles”. |
16 enero 2010
"Álbum del Recuerdo - Imágenes de Nuestra Tierra" - Diario El Llanquihue - 16 de enero de 2010
Continuando con nuestras publicaciones en este primer mes del año 2010, presentamos a continuación el Álbum del Recuerdo correspondiente al sábado 16 de enero, página que el CEPH confecciona todas las semanas para el diario El Llanquihue, la cual se publica los días sábados en la página A2 del diario en su formato impreso en papel. Contactar al correo: ceph.pm@gmail.com o a los fonos 65-542650 - 95536627 con Alejandro Torres. AMPLIAR ANGELMÓ POR DANIEL DE LA VEGA Durante varios días de noviembre de 1951 la ciudad de Puerto Varas se vio convulsionada con la realización del Congreso Eucarístico en dicha ciudad. Durante el encuentro se analizó el evangelio, se recordó a Jesucristo y se reflexionó sobre las obligaciones que debe tener todo buen cristiano. Asistieron a este Congreso Eucarístico el Cardenal José María Caro y 10 Obispos chilenos. La Cruz Monumental que se encuentra en la cima del cerro Philippi recuerda la realización de este magno acontecimiento religioso. La imagen, captada por un fotógrafo particular, muestra la multitud de gente congregada en la Plaza de Armas y en calle Del Salvador esquina Santa Rosa, en los momentos en que diversas entidades de la ciudad realizaban un desfile por las calles céntricas de Puerto Varas. LUISA DONOSO QUEVEDO Cerca de las 5:00 de la madrugada del viernes 1º de diciembre de 1967, don Ramón Silva, nochero del Hospital Regional de Puerto Montt, es despertado por un hombre que conducía una citroneta. Le señala que acaba de encontrar en la calle el cuerpo sin vida de una joven. En horas de la mañana, la policía ya conocía la identidad de la joven y del conductor de la citroneta: Luisa Donoso (18) y el abogado Alfonso Pérez Sánchez (39). Ambos mantenían un escandaloso affaire, pues el abogado era casado con la regidora de Puerto Montt Elsie Llewlyn. Al día siguiente, cuando la población puertomontina se preparaba a leer los antecedentes del caso en las páginas de El Llanquihue, en la primera página del diario se podía leer: “El juzgado prohíbe información sobre la muerte de una joven”. Según el certificado de defunción, Luisa Donoso falleció de “herida a bala penetrante cardiaca”. En primera instancia, se calificó el caso como homicidio y se dio la orden de detención del abogado Pérez Sánchez. Posteriormente el caso pasó a manos de la Corte de Apelaciones de Valdivia. Finalmente la sentencia fue dictada el 10 de noviembre de 1968. Pérez Sánchez fue declarado culpable de “cooperación al suicidio” y dejado en libertad tras pagar una fianza. El fallo provocó desazón en la familia de Luisa Donoso. Para ellos la justicia había operado favoreciendo a los poderosos. |
09 enero 2010
"Álbum del Recuerdo - Imágenes de Nuestra Tierra" - Diario El Llanquihue - 09 de enero de 2010
Continuamos esta segunda semana del nuevo año que acaba de comenzar con un nuevo Álbum del Recuerdo que esperamos sea del agrado de todos, y que puedan conocer a través de estas imágenes y de las pequeñas historias y descripciones que acompañan a cada fotografía un poco más de nuestra historia local. Esta página la confecciona el CEPH para el diario El Llanquihue, y se publica todos los días sábados en la página A2 del diario en su formato impreso en papel. La edición corresponde al sábado 9 de enero del 2010. Si desea ver esta misma página en el sitio web del diario El Llanquihue, click aquí VAPOR COLONIA CREACIÓN ESCUELA Nº 1 La fotografía, captada por Arnoldo Skoruppa en 1940, muestra una vista general de la ciudad, desde lo alto del cerro ubicado a la altura del Puerto. Se aprecia que los trabajos de relleno en la costanera han concluido totalmente, pero aún no se han comenzado a construir edificaciones sobre esta ampliación. Se está pavimentando la avenida que corre a lo largo de la costanera en dirección al centro. El cerro Miramar ha disminuido bastante su volumen con todo el material que le fue extraído para los rellenos del borde costero. En el sector del Puerto se observan trabajos de construcción de las instalaciones y bodegas que necesitará para su buen funcionamiento. En la bahía se encuentran los buques de la Escuadra chilena, al mando del acorazado Almirante Latorre. Se observa además el buque alemán Erlangen, que por motivo de la Segunda Guerra Mundial se mantuvo anclado frente a la ciudad entre 1939-41. |
02 enero 2010
"Álbum del Recuerdo - Imágenes de Nuestra Tierra" - Diario El Llanquihue - 02 de enero de 2010
FELIZ AÑO NUEVO 2010!! Ha comenzado un nuevo año, el que esperamos sea muy provechoso para todos los amantes de nuestra historia local. Los mejores deseos y parabienes a todos nuestros lectores y comunidad en general. Y ya que estamos iniciando un nuevo período, queremos entregar algunos comentarios. Con el avance acelerado de las tecnologías y de los medios de comunicación, cada día es posible ir descubriendo nuevos pasajes de nuestro pasado, nuevas historias tanto familiares como de sucesos que alguna vez ocurrieron en nuestra zona. Así mismo, a través de la constante búsqueda de investigadores locales, se han ido encontrando nuevas fotografías, muchas de ellas inéditas y nunca antes publicadas, que nos muestran un pasado rico en personajes, vivencias, eventos, conmemoraciones, edificaciones, monumentos, etc., que a la fecha, si no fuera por estas imágenes que inmortalizaron el momento, pasarían al olvido más absoluto. A través del conjunto de estas imágenes, que se han podido ir recopilando desde álbumes fotográficos familiares, en ferias persas, en el comercio especializado tanto nacional como extranjero, y en un sinnúmero de lugares, es posible ir reconstruyendo nuestra historia, la evolución y el desarrollo alcanzado por la ciudad hasta nuestros días, tanto a nivel social, cultural, geográfico, etc. Historias que muchas veces estaban inconclusas o no tenían un documento gráfico que respaldara lo narrado, en la actualidad, a través del trabajo mancomunado de todos los integrantes del Centro de Estudios del Patrimonio Histórico de la provincia de Llanquihue (CEPH), se ha podido dilucidar muchos episodios que no estaban claros o que sencillamente estaban errados a falta de una fotografía que dijera lo contrario. Es por esto que las fotografías antiguas son tan importantes de poder conservar y mantener adecuadamente, ya que constituyen un documento histórico que permitirá a los investigadores e historiadores locales, estudiarlas en profundidad y en todos sus aspectos, desentrañando detalles que en el conjunto de un Archivo Histórico Fotográfico Patrimonial, como es el que nuestra entidad está formando, serán de gran ayuda para conocer e ir armando una cada vez más completa historia de Puerto Montt y sus alrededores. Por este motivo invitamos a toda la comunidad a mostrarnos sus fotografías que tengan guardadas en sus álbumes, no importando si son antiguas o de solo algunos años o décadas atrás, ya que en cada una de ellas podrían haber detalles que al ojo del investigador podrían ser importantes de rescatar. Les esperamos entonces con esas imágenes y ayúdennos a conocer más acerca de nuestro pasado. Pueden tomar contacto, agradeciendo de antemano su colaboración, con: * Alejandro Torres (investigador fotografías patrimoniales): fonos 65-542650 – 95536627 - email: atorres.pm@gmail.com - Presidente CEPH * César Sánchez (profesor de historia): fono 65-255488 - Biblioteca Regional (primer piso edificio del Museo Juan Pablo II) - email: cesarsanchezvera@hotmail.com - Director CEPH * Juan Carlos Velásquez (profesor de historia - Instituto Alemán de Puerto Montt): fonos 65-713100 - 78709281 - jcvelasquez@ialeman.cl - Director CEPH AMPLIAR Nació el 8 de octubre de 1882 en Velbert, Renania del Norte-Westfalia, Alemania. Llegó a nuestro país en 1910, como empleado de la firma Mertens de Valdivia, una de las casas comerciales más importantes de Chile. En 1918 contrajo matrimonio en Montevideo, Uruguay con Clara Kleffner, con quien aparece en la fotografía, naciendo de esta unión dos hijas. En 1926 se retira de la firma Mertens y se asocia comercialmente con Jorge Wilhem abriendo la Ferretería “El Ancla” en Puerto Montt. En 1928 adquieren la ferretería y mercería de don Albert Scholtbach y establecen una sucursal en el barrio Cayenel. Posteriormente, la sociedad Rensinghoff -Wilhelm abrió locales del mismo rubro en varias ciudades de la zona, entre las que se cuentan Puerto Varas, La Unión, Osorno y Coyhaique. El 5 de septiembre de 1955, el gobierno de la República Federal de Alemania lo designó Cónsul en Puerto Montt. Falleció en Santiago el 14 de junio de 1962, a la edad de 78 años, luego de una larga y penosa enfermedad. ERUPCIÓN VOLCÁN CALBUCO DILUVIO EN VERANO |